Esa época del año para sentarse a devorar documentales

En pocos días empieza la edición 2017 del Festival Encuentros del Otro Cine (EDOC). Cada año, durante unas semanas, la oferta de documentales se dispara en mayo. En esta edición la retrospectiva está dedicada al cine de la francesa Claire Simon, de quien hicimos un número hace unas semanas, y la cineasta estará presenta en varias de las proyecciones de sus documentales para responder las preguntas del público al final de las funciones.

Dentro del marco del EDOC también, pero por otra parte, un festival como este, del que todos reclaman más, da cuenta también de una extraña situación: Luego de una década en la que la producción cinematográfica en el Ecuador ha crecido de forma sostenida, el género que mejor se ha logrado desarrollar es el del documental. Sin embargo, son pocas las ofertas de proyección de documentales en las salas el resto del año, una vez que el festival llega a su fin.

Por ahora, pensemos en los directores ecuatorianos que van a presentar sus películas en esta edición: aquí hemos profundizado un poco en la obra de tres de estos directores, todos jóvenes emprendiendo en el audiovisual.

Literaturas del Ecuador es un libro que recopila ensayos valorativos de la obra de siete escritores ecuatorianos considerados como íconos de nuestras letras. Escrito por el editor, poeta y catedrático Paúl Puma, esta obra fue pensada como un puente entre las obras de esos autores y el público en general. Que es, dice Puma —y dice Cecilia Ansaldo—, finalmente, el papel que debería desempeñar la crítica.

Además, luego de varias semanas, vuelve la columna de crítica teatral Vayaselaver. En esta ocasión, Hugo Avilés comenta una obra de Muégano Teatro: Ulrike Newton John, y se hace unos cuestionamientos parecidos a los de Puma: ¿Dónde está el puente?

Luis Fernando Fonseca llega a la quinta entrega de su investigación sobre el rastro arqueológico que entró en discusión a propósito de una de las zonas marcadas para ser una estación del Metro de Quito.

La edición 288 de CartóNPiedra, sin querer queriendo, ha venido revestida con una necesidad de entender al otro. Leámonos, y entendámonos.